Convento Hermanas Concepcionistas

Felicitamos a la Hna. Diana Mendoza, por su toma del hábito e inicio de su noviciado. Y también a la Hna. Francelly Vargas quien renovó sus votos temporales.    Gracias a la comunidad por acompañar esta ceremonia y Ecuaristía, donde se resalta la importancia de la espiritualidad y de la vida religiosa.   Gracias a las Hermanas Concepcionistas por sus oraciones permanentes por todos nosotros y por estar siempre atentas para servirle a los jardineños! Las queremos mucho!! 🤗

En el Monasterio no hay tiempo para la aburrición. Todo esta debidamente programado y todo convida a amar a Cristo y cuando se ama nunca se aburre, el tiempo no alcanza...

La oración, el silencio, el recreo a sus tiempos, las lecturas, el estudio de la palabra de Dios, documentos de la Iglesia, etc. Los cánticos, la disciplina del horario, siguiendo unas directrices marcadas por las constituciones de la Orden, el compromiso de unos votos que le recuerdan continuamente el amor de Jesucristo que estimula a su imitación; la ausencia de distracciones humanas, hacen brotar, aunque parezca paradoja, una fuente de alegría.

Ningún problema de la humanidad nos es indiferente, nos solidarizamos con todos y ante el Sagrario colocamos todas sus necesidades.

Como no había residencia previste se hospedaron en la casa de don Pachito Velásquez, donde permanecieron por un mes, luego las llevaron a la casa cural, que con mucha bondad las hospedaron y permanecieron hasta el 20 de Octubre de 1920.

El Señor Misael Velásquez donó el terreno para construir el Monasterio; cuando terminaron una parte, pudieron la religiosas trasladarse a su nueva morada.

En la tarde de eses mismo día ingresaron dos hijas de Don Misael Velásquez: Herminia y Débora.

Los nombres de las fundadoras Son: Madre María de Jesús que venia como Abadesa. Madre Nieves, Sor Rosa, Sor Bernarda y Sor Isabel y una postulante que al poco tiempo se retiró.

Fueron muchos los sacrificios y dificultades que se les presentaron pero estas alma  de temple. Forjadas en la oración y la penitencia, no dudaron en seguir adelante.

Dios que no se deja vencer en generosidad, movió los corazones de los habitantes de este Pueblo quien acudieron a traer sus limosnas y así pudieron iniciar la construcción.

Este monasterio a lo largo de su existencia a fundado 5 Monasterios de vida contemplativa y uno de vida apostólica, para el servicio de los sacerdotes enfermos y ancianos.

Las fundaciones fueron en  Urrao, Santuario, Ciudad Bolívar, La Estrella y Santa Marta.  La de vida apostólica en Cali, donde fueron acogidas por el Señor Arzobispo Monseñor Darío Monsalve.